TRAYECTORIA COMO CAPACITADOR Y CATEDRÁTICO UNIVERSITARIO
En este ejercicio 2022, se cumplen 35 años de labor docente, de los cuales 15 como capacitador de empresas y 20 como catedrático universitario en pre y posgrado respectivamente, en diferentes instituciones así como universidades y en las diversas modalidades: presencial, blended y on line (en esta última, como instructor en la red Laureate International Universities). Dicha trayectoria docente se ha conjugado o alternado con el ejercicio profesional, la consultoría e investigación; además se ha desarrollado los roles de asesor y revisor de tesis, jurado de sustentación de tesis de pregrado y posgrado. Adicionalmente, se ha sido autor y coautor de diferentes artículos científicos debidamente publicados.
Con suma humildad, dicha trayectoria se ha labrado en base a un esfuerzo constante y a un aprendizaje permanente, convalidando la solventa frase "Sólo puede enseñar, el que sabe aprender permanentemente".
Lo más importante de ello es la experiencia adquirida, sea en el modelo pedagógico o en el andragógico; cuando revisamos la evolución en el tiempo transcurrido, separamos la experiencia de capacitador en temas principalmente de Administración y Relaciones Humanas a nivel nacional, especialmente en el ex IPSS con el personal administrativo y asistencial de diferentes jerarquías y profesiones (a nivel nacional), además en varias empresas.
Ser capacitador implica conocer y compenetrarse con la misión como visión institucional o empresarial, no sólo es dictar una materia en teoría y práctica, sino llevar la capacitación al terreno concreto del servicio al ciudadano, asegurado, cliente o público en general (capacitación en servicio).
En el caso de la docencia universitaria representa un mayor desarrollo técnico del proceso educativo, bajo herramientas concretas y modernas. Nos ha tocado diversas experiencias, como la inclusión de la educación virtual además de la presencial y la de tipo híbrido.
Un aprendizaje sustancial obtenido es que todo docente debe investigar constantemente, estar actualizado y además, contar con una filosofía educativa y estilo propio. Todo ello apoyado en la denominada "Libertad de Catédra".
Por otro lado, unos de los roles docentes es crear la mística por educar con desprendimiento, pasión y trascendencia en el tiempo (visión), hacer notar a los estudiantes que los frutos de una buena educación no son inmediatos pero sí seguros, especialmente cuando se trabaja con la llamada "Calidad Educativa".
Otro aspecto bastante relevante es el hecho de convencer (no imponer) la aplicación de una "Exigencia Académica" que justamente ayude a una mejor obtención de los resultados, sobretodo en la formación profesional integral y desarrollo de competencias.
Un tema lateral y no menos importante, es aplicar diversas estrategias didácticas vinculadas a casos reales y concretos del contexto, no teorizar en exceso. Los futuros profesionales deben ser pensadores pero también creadores y ejecutores de soluciones vale decir, resolver problemáticas de la realidad nacional e incluso mundial (estamos en un mundo globalizado).
En el caso concreto del postgrado, sea Maestría o Doctorado, hay que incentivar acentuadamente la investigación y sus múltiples posibilidades para la sociedad y el país en general. Dichos niveles educativos amerita una mayor exigencia académica para especializarse en actualizadas líneas de investigación (Maestría) y luego, investigar y filosofar para crear teorías nuevas así como conceptos renovados de las diversas profesiones (Doctorado). En ambos casos o niveles educativos, hay que producir y compartir conocimientos nuevos con sus respectivas evidencias así como actualizaciones (tesis, artículos e investigaciones dirigidas, entre otros procesos para el conocimiento científico).
En resúmen, estos 35 años me han servido para conocer y comprender la mayúscula importancia del estudio, la investigación y producción del conocimiento como herramientas fundamentales para pretender un mejor país y futuro exitoso con posibilidades sostenibles.
El conocimiento y la experiencia nos permite recomendar cinco (5) aspectos en materia educativa a todo nivel o modalidad:
1-.Toda planificación y modelo educativo deben estar unido a una visión país (objetivos nacionales), ser sostenible y mejorado, sin variar su esencia y filosofía.
2-.Impartirse una educación integral, pero partiendo de la premisa de formar buenas personas y buenos profesionales.
3-.Intensificarse el conocimiento y la tecnología, así como la creatividad, la innovación y el emprendimiento.
4-.Motivar incansablemente la lectura y su eficiente comprensión lectora, así como la oratoria correspondiente y la elaboración de libros, artículos o proyectos de nuevos conocimientos.
5-.Aplicar un modelo educativo orientado a resolver casos, problemas y necesidades concretas del país, que incluyan un modelo de desarrollo auténtico y sostenible, además de enseñar o entrenar a GESTIONAR (capacidad de gestión).
Los que ejercemos la docencia, en cualquier contexto y modalidad, sabemos muy bien el compromiso sincero como permanente que debemos tener con los estudiantes y profesionales para trasmitirles no sólo conocimientos, sino herramientas y valores éticos para una debida formación integral, bajo una clara arista que se reitera: "Primero calidad humana, luego calidad profesional".
Cordiales saludos.
Dr. Leonardo Velarde Dávila.
01 setiembre 2022.