EL ALTO VALOR DEL TIEMPO

En todo lo que contamos tangible o intangible, existe una valoración aproximada o precisa. El tiempo ocupa un lugar privilegiado, no hay un recurso más valioso que el tiempo porque es irrecuperable y se está utilizando en todo momento.

No se puede ahorrar tiempo ni guardar tiempo para después. El ser humano desde que nace, ya está utilizando su tiempo y así todos los seres vivos.

Por tales consideraciones el tiempo hay que saber emplearlo y aprovecharlo, no derrocharlo. Hay un tiempo para trabajar, para estudiar, descansar y así en todas nuestras actividades: lo más importante es saber INVERTIR y APROVECHAR el tiempo lo mejor posible.

Una forma de desaprovechar el tiempo es cuando somos impuntuales e inclusive hacemos perderlo a otras personas, lo cual debe tomarse incluso como una falta de respeto. En tal virtud, hay ciertas reglas básicas para una mejor administración del tiempo:

a-. Planificar con objetividad y realismo (objetivos, metas y estrategias asequibles).

b-. Cumplirse con los tiempos planificados.

c-. Controlar que el tiempo este unido a objetivos o metas concretas.

d-. Retroalimentar y optimizar los resultados, permanentemente.

Ello no significa una rígidez del control del tiempo, hay que incluir cierto margen de holgura o flexibilidad según el caso lo amerite. Lo esencial radica en que no exista desperdicio en el uso del tiempo, de tal manera que cuando transcurra una semana, mes o año podamos verificar que el tiempo empleado fue PRODUCTIVO o bien invertido.

El uso del tiempo nos corresponde a todos, hay que tener unas buenas prácticas y siempre con la idea de una mejora continua, lo cual favorezca al logro de los propósitos prestablecidos. Una agenda ayuda mucho al uso del tiempo pero, más la práctica de cumplirla debidamente.

Si abordamos el tiempo con un enfoque más estricto, podemos afirmar que dicho elemento es decisivo en nuestra existencia aunado a nuestra biología o ciclo de vida. Conforme avanzamos en edad (y en tiempo transcurrido) valoramos más el tiempo y su importancia significativa.

Por todo lo expuesto, seamos muy conscientes de que el tiempo no se detiene y sigue pasando, por lo tanto hay que invertirlo bien en temas centrales o fundamentales como la salud, el trabajo, la familia, los proyectos, la reflexión y todo aquello que lo consideramos importante para todos nosotros (incluyendo los valores éticos, la filosofía personal y el estilo de vida de cada uno).

No olvidar de respetarse el tiempo de los demás, cuando nos reunimos con amigos, familiares o colegas de trabajo le estamos brindando nuestro tiempo y viceversa. Una recomendación final es habituarnos cada fin de año a: revisar lo planificado y logrado para luego, planificar lo del año siguiente. Es vital administrar bien nuestro tiempo de VIDA, otra estrategia es aprovechar y usar el tiempo en INTENSIDAD y CALIDAD, más que en cantidad.

Finalizo destacando la siguiente frase: "Cada uno de nosotros tiene una cuota de tiempo (llamado vida) que se va agotando cada día". Además, no siempre se puede cumplir dicha cuota de vida en su totalidad, por una circunstancia o interrupción fortuita que lamemtablemente nos puede ocurrir.

Saludos cordiales.

Dr. Leonardo Velarde Dávila.

01 de Agosto del 2024.